This beautiful city seems empty. All the people in the world and you could still feel lonely. What's the point of it all, with out the person you love. Some times you just need to start again. In order to fly. - Alicia Keys.

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Allí estaba de nuevo. Casi dos años después.
Tú, yo, y si eso, el mundo.
Abrazados en el mismos lugar, mi cabeza contra tu pecho.
Se levanta mi cara al ritmo de tus latidos.
Mi respiración se acompasa con tu respiración.
Cierro los ojos y siento tus manos que buscan mi cara.
Me agarras fuerte, como si no quisieras dejarme marchar.
Han pasado casi dos años, pero la sensación es prácticamente la misma.
Amor. Amor un poco más maduro, más seguro,  más entregado.
Tú, yo, y si eso, el mundo.
Y ahí sigo yo. Intentando contener un sentimiento que no se entiende bien.
Será que he pasado miedo. Pero a pesar de todo, siempre me has sacado una sonrisa del bolsillo.
Siempre consigues hacerme feliz.
Me haces feliz, me haces feliz al igual que hace 2 años, y al igual que lo harás dentro de 26.
Lo eres todo. Lo eres todo en mi vida.
Y no quiero salir de ese mundo paralelo que nos creamos.
Los coches pasan.
Las luces se apagan.
Tu..
Yo...
Y nuestro mundo.

Da un paso atrás. Sólo mírate. Eres una persona. Eres preciosa. Eres realmente preciosa. Puedes ser nada, puedes ser todo. No odies a alguien porque rompiera tu corazón, tus padres estén separados o tu mejor amigo te haya traicionado. Si alguien te ha humillado, te llama gorda, fea, estúpida o te hace sentir poco valorada. No te preocupes por las cosas que no puedas controlar, que se te escapen de las manos. Llora cuando lo necesites, y suelta lo que te reconcome. No te aferres a los recuerdos dolorosos, sólo porque tengas miedo de olvidar, deja de lado las cosas del pasado. Olvida las cosas que solo traen malos recuerdos. Deja de tomar las cosas por sentado, vive para algo. Vive para ti. Enamórate. Desenamórate. Enamórate. Desenamórate. Haz esto hasta que realmente encuentres lo que es el amor. Pregunta cosas. Cuéntale a la gente realmente cómo te sientes. Duerme debajo de las estrellas. Crea. Imagina. Respira. Vive. Busca cosas bonitas, bellas. Conoce gente nueva. Haz feliz el día de alguien. Persigue tus sueños. Vive la vida en su completo potencial. Deja fuera las cosas que sean malas en tu vida y vive jodidamente feliz. Y un día, cuando seas mayor, miraras atrás sin lamentos.

Hello there, the angel from my nightmare.

Por ti, escribiría la biblia en una gota de rocío.
Por ti, metería el universo en una botella.
Por ti, iría nadando a la Antártida.
Por ti, encontraría la aguja del pajar,encontraría un trébol de cuatro hojas en un prado enorme, y encontraría en la arena aquel grano de azúcar.
Por ti, aprendería a hacer malabares con rinocerontes subida a una pelota amarilla.
Por ti, correría la maratón descalza.
Por ti patinaría por los anillos de Saturno.
Por ti haría que el mar fuera dulce y la lluvia seca.
Por ti, por ti amor, por ti sería esclava de tus besos, presa de tus palabras, y cautiva en tus brazos.
Por ti...
todo lo que hago lo hago por ti. Es que tu me sacas lo mejor de mi. Soy todo lo que soy, porque tu eres todo lo que quiero.
                                                                                                          

                                                                                                    ∞ 

Alive.

Miércoles 7 de septiembre de 2011.

Último día en Fuerteventura después de cinco días de absoluto relax. Teníamos ya todas las maletas en el coche porque nos íbamos unas horas más tarde, pero de camino al aeropuerto paramos en esta playa. Sinceramente no recuerdo el nombre, pero se que era enorme. Tenía ya una vaga idea de la foto, así que cogí el traje que tenia en la mochila y me lo puse, le di la cámara a Carmen y yo me dispuse a "posar". Me di cuenta de que unos viejitos que estaban sentados en las rocas me miraban con muchísima curiosidad. No, aquello no funcionaba. No salía bien. Paré un momento y metí los pies en ese mar (que por cierto, fue el único día que estuvo revuelto) de agua tan cristalina. Y sentí como el vaivén de las olas hacía una maravillosa música. Respire lo más profundo que mi cuerpo quiso, y acto seguido, me puse a bailar. Sí a bailar. Estaréis pensando que me volví loca, ¡yo que sé! Tampoco entendía que me pasaba...Lo único de lo que si estoy segura es de que fue una experiencia irrepetible. La espuma rozaba mis pies, la arena los acariciaba, y yo como una niña pequeña jugaba a esquivar las olas.

¿Dónde...dónde me había metido?

No sé ni dónde estaba ni quién estaba intentando ser. Seguir prototipos, eso es lo que estaba haciendo. Que difícil es que no te etiqueten. No quiero, basta, se acabó.
Quiero ser yo. Quiero vestirme un día con camisas y pantalones anchos, otro con botas y chaqueta de cuero, y otro con vestido. Quiero ayudar a gente que lo necesite, desde amigos que necesitan un apoyo en un examen a la mujer que necesita ropa para sus hijos. Quiero escuchar punk y no ser por ello una rebelde anarquista. Quiero   seguir comiendo carne aunque me gusten los animales, seguir poniéndome clips en la oreja y escribirme las cosas que tengo que hacer en la mano. Quiero decirle si a la paz pero seguir odiando a personas sin razón.
Y vale, etiquétame de lo que quieras, ilusa, incoherente, contrariada, soñadora, rara...pero puedo decir con orgullo que seré yo misma.

Cinco cosas por las que quiero dar gracias antes de acostarme.

- Porque no he perdido el bus.
- Porque, en un país diferente, he puesto la radio y ha sonado una de mis canciones favoritas.
- Porque había ordenador en el hotel y por fin, pude hablar con mis amigos.
- Porque ¡no había potaje para comer!
- Porque hoy, aunque sigue lloviendo, han salido dos preciosos arco iris, uno encima del otro.

- Porque conseguí coger el pintauñas al vuelo antes de que estallara contra el suelo.
- Porque he vuelto a España, y puedo hablar contigo.
- Porque comí paella.
- Porque he tocado el piano descalza, tal y como me gusta.
- Porque duermo con mi hermana y no ronca.

- Porque hoy te he visto.
- Porque me desperté y me di cuenta de que ya estaba en mi camita.
- Porque me encanta ver como abren un regalo que has hecho.
- Porque comí una ensalada bien fresquita.
- Porque me ha encantado oir tu risa de nuevo.

You are fuckin perfect to me. ♥

Siempre he pensado que amar es algo complicado. Es complicado y de soñadores.

Es probable que tengas a tu media naranja al otro lado del mundo y que no lo sepas. ¿Por qué no? Siempre he pensado que enamorarse es algo relativo...te enamoras de una persona sin querer.  Por eso mismo, no creo en el amor a primera vista, es algo superficial y sin sentido, ya que el amor es algo más profundo, algo tan profundo que dudo que muchas personas hayan llegado tan sólo a rozarlo.

Y sí, seré una soñadora, pero estoy segura que esto es amor. Amor joven, amor inocente, amor de amar. Estoy enamorada de ti, de tu sonrisa, de tus ojos, de tu cuerpo entero, estoy enamorada de como me haces ser, de como un tu cambia a un nosotros, de nuestras caricias, nuestros secretos. Nuestras manías y defectos, todos perfectos. Estoy enamorada de que te duermas en mi pecho, de que me hagas reír, de cada abrazo, de cada 11, de cada canción cantada al oído. Estoy enamorada del amor, y, ¿sabéis que? soy completamente feliz.

Jorge Francisco Pinto.

Cuando crees que conoces todas las respuestas, llega el Universo y te cambia todas las preguntas...

Perdona, pero quiero una vida junto a ti.

Sentada en el viejo sofá, mirándote. Tú, en frente, en la mecedora con el catálogo de ikea ojeando mesas rojas y sillas naranjas. Cajas de mudanza por todas partes. Ni si quiera hemos desempaquetado la tele. Cojo el chocolate que he dejado sobre una de las cajas y lo sostengo entre las manos. El chocolate me produce añoranza. Tristeza de los que están y no los veo, y de los que se fueron y no los vi.

Y me quedo así, mirándote. Todo huele a nuevo, pero no me da miedo. No me da miedo lo que pueda pasar de ahora en adelante. Ya no.

  

Forever young.

Pues sí, aquí estoy yo. Subo las escaleras de dos en dos con la música a todo volumen. Veo que voy dejando atrás a chicas repintadas con zapatos imponibles, escotes hasta el ombligo y el peinado de moda que previamente han estado probándose unas aproximadamente...¿2 horas? Sigo haciendo malabarismos para no caerme en las escaleras y echo a correr hacia el piso más alto. 231 escaleras en total, 6 kilos en la maleta de estrés, añoranza de lo pasado, y la euforia de un día nuevo, un día nuevo por descubrir. Dejo la mochila en la primera mesa que veo y me encamino al banco que veo más cerca. Me siento, cruzo los pies, los descruzo, me recuesto para detrás, me echo para adelante. Finalmente encuentro la posición perfecta. Cruzo los pies como un indio y tatareo. Dejo atrás los prejuicios, hace tiempo que los deje en el cajón del fondo. Sí, así se vive mejor. Sigo mirando a la gente, pero a la vez, pienso que todos están en una especie de videojuego controlados por una sociedad que da asco. X O Δ Δ y que siga el juego. Todos iguales. Todos parecen hacer lo mismo. Y me veo diferente. ¿Y si todos se ven diferentes? ¿Somos realmente diferentes? Mmm...acaba de tocar el timbre. Hoy me espera un gran día. Ciao bella.

Metáforas de la nada.

Ayer morí. Hoy amanecí llena de heridas. Pero aquí estoy, viva.
Mi corazón late muy fuerte, tanto que parece querer salir y pegar cuatro gritos. Las manos tiemblan sin siquiera poder apartarme el pelo de la cara. No encuentro respuestas a nada. Ya no recuerdo ni mi nombre. Estoy perdida, perdida en esta casa, en esta ciudad, este planeta. ¿Dónde están todos? ¿Es que no conozco realmente a nadie aquí?

Lo que no te mata, te hace más fuerte.

Nada que objetar.

Porque sí. Porque sí y punto. Porque hay veces que simplemente pasa. Personas que entran y que se van. Es ley de vida. Pero aún así duele. Un dolor sin cura, sin medicamentos. El dolor más fuerte, más doloroso. ¿Y por qué? ¿Por que a mi? Y pensar que no puedes hacer nada. Nadie puede hacerle nada, nadie te puede ayudar aunque lo intentan. ¿Lo sienten? ¿Lo sienten? Pero que van a saber ellos, ni siquiera le conocían. No lo sienten de verdad, no sienten tu dolor. Lo único que sienten es tu sequedad.

Para tener unos labios atractivos di siempre palabras amables.

Para tener ojos adorables, mira siempre las cosas buenas de la gente.

Para una figura esbelta, comparte tu comida con los que padecen hambre.

Para tener un pelo lindo permite que un niño pase sus deditos por él, por lo menos una vez al día.

Para mantener la elegancia, camina siempre con la certeza de que nunca estas sola.
La gente más que las cosas, tiene derecho a ser restablecida, revivida, redimida y reivindicada. Nunca rechaces ni deseches a nadie.

Recuerda, si necesitas una mano amiga la encontraras en el extremo de cada uno de tus brazos. Con el tiempo y la madurez descubrirás que tienes dos manos: una para ayudarte a ti misma y otra para ayudar a los demás.

Audrey Hepburn.

Filosofía pasajera.

Las gotas siguen resbalando por el cristal, haciendo pequeñas carreras entre ellas. Suelen hacerme gracia, son tan infantiles...pero hoy no, hoy parecen lágrimas. Parece que el cielo llora conmigo en silencio. Llora conmigo y con todos los que piensan como yo. Situémonos.
Miércoles 30 de marzo. Son alrededor de las nueve y media de la noche. Estoy en la autopista, de copiloto en un coche frio y completamente en silencio. Un atasco enorme. Luces. El mar que contrasta a la derecha, las montañas que quieren arroparnos, hasta la Luna curiosa parece que se ladea para ver lo que pasa.
Un accidente. Un accidente por culpa de... ¿qué? Probablemente, en esta ocasión, de la lluvia mezclada o con las prisas de volver a casa porque se hace tarde. Pitas retumban en todas partes. ¿Qué se arregla con eso? Molestar. Si acaso, hacernos notar que estamos ahí. Poco a poco nos vamos acercando. Me equivoqué. Oímos decir por la radio que el conductor iba lo que se dice alegre. Alegre... ¿alegre es darte a la fuga y dejar a una persona muerta? A saber si esa persona tenía hijos y quería regresar de una dura jornada de cafés, reuniones, trabajos. Quién sabe, a lo mejor estaba a punto de casarse, o de hacer el viaje de su vida. Tal vez viviera sólo. Vivía solo pero el no eligió morir.
Seguimos de largo y el atasco desaparece. Llueve más fuerte y mi madre acelera.

Caminante no hay camino se hace camino al andar.

Hope.

Distancia. Desde tu puerta hasta la suya. Desde un continente a otro. Desde un mundo físico a otro más inalcanzable. Pueden ser 10, 20 o 10.000 km. , pero siempre distancia. Siempre es puta distancia. ¿Sabes qué? Distancia se comporta como una persona. Distancia tiene mala fama. Distancia ha venido a mi pidiéndome ayuda por su mala reputación. Ella se arrepiente de su pasado. Ella no quiere que vuelvan a discutir por su culpa.
La distancia ha dejado de ser persona. La veo, de la manera más simple y humilde que hay. Distancia se ha disfrazado de cielo. Mientras tú sigas viendo el mismo cielo que yo, seguirás aquí, a mi lado.

Gustavo Adolfo Bécquer.

Dices que tienes corazón, y sólo

lo dices porque sientes sus latidos;

eso no es corazón..., es una máquina

que al compás que se mueve hace ruido.

¿De qué color son los colores?

Un ciego, ¿cómo sabe de que color es el cielo? ¿De qué color es la hierba?
Hay cosas que nuestros propios ojos no pueden ver, nos empeñamos en decir, en creer, que los humano somos los más inteligentes. Yo pienso que no, que incluso seamos de los más estúpidos. Queremos creer que tenemos respuestas para todo, y no es así. Hay cosas que simplemente, no nos corresponden saber.
El universo es sencillamente infinito. Nosotros mismos inventamos la palabra, in-fi-ni-to.
El amor no es ciencia. Es magia. No es química. Es cariño. No hay física. Es ver la perfección en personas imperfectas.
Quizás haya vida después de la muerte, quizás no.
Un niña, le explicaba a su amigo ciego los colores.
-¿Cómo son los colores? ¿Qué forma tienen? ¿Cómo es el rojo?
-El rojo...el rojo es el color del calor. Es el color del fuego. El color del cariño, pero también el color de la furia.
-¿Y el azul? ¿Cómo es el azul?
-El azul es el color del cielo. Es el color del mar y de los ríos. Es el color de lo mojado,de lo humedo, de la tristeza y la nostalgia.
-¡Cuéntame más María, cuéntame más!
-El amarillo es el color de la alegría. Es el color que sientes cuando eres muy feliz. El blanco, es el color de la nada, es un color frío, y no provoca sentimiento alguno, más bien indiferencia. El verde...
-Yo sé como es el verde María. Cuando volví a casa por primavera, me baje del coche y la sentí. La sentí a ella. La sentí después de meses en el hospital. Sentí a mi madre, así que fui corriendo y la abracé. Ella me dijo que todo era verde. Todos los prados estaban verdes, los árboles, y el pequeño jardín. Todo era verde, como la esperanza de que me pusiera bien.
Para mi ese niño ve más que muchos de nosotros. Más que yo misma. Más que la mayoría.

Apto para TODOS los públicos.

30 de enero. Día de la paz. Haz una redacción, sobre las cosas que debes hacer el día de la paz, dice la profesora.

¿Cosas que debemos hacer ese día? Empecemos en que todos los días deberían ser "días de la paz". Digamos también que no tendría porque existir un día de la paz, si no fuéramos tan egoístas. Supongamos que probablemente, esa misma profesora llega a su casa después de clase, y coge el periódico. Coge el periódico y al ver las horribles y violentas imágenes de la portada, pasa la página. Después de ojear sin interés la parte de economía, enciende la televisión y ve una película. Una niña africana que quiere ser escritora y tiene que caminar 23 kilómetros para llegar a su escuela. Qué exageración, al fin y al cabo es sólo una niña, piensa.

Más tarde su hijo, de unos ocho años, llega a casa y pone los dibujos. Va cambiando de canal y le salen las noticias. Salen las imágenes de los heridos tras un atentado suicida en Pakistán, y ella rápidamente, le grita para que cambie de canal. Le parece muy fuerte para su hijo. Le parece "muy fuerte" ver lo que esta pasando realmente ahí fuera. Le parece "muy fuerte" que no vea las cosas acabadas con un final Disney. A la que le parece realmente fuerte es a mi. Ver una imagen y llorar. Llorar por ellos. Llorar porque no se lo merecen, no lo han elegido. Por esos niños que no preguntan ¿mamá hoy qué comeremos? si no un mamá, ¿hoy comeremos?

Y sí, hoy es 26 de enero, día de la paz.

Risa a risa. Minuto a minuto.

Y dijo el sabio: "Sólo sé que no sé nada."
Sabes que no te acostaras sin aprender nada nuevo. Cada día como un volver a nacer. Algo nuevo, algo distinto.
Poner un espejo frente a otro. Caminar descalzo sobre la hierba aún húmeda. Caminar bajo la lluvia. Besar lentamente. Ver una humilde y sincera puesta de Sol. Sonreír a la gente por la calle. Escuchar tu canción preferida cuando menos te lo esperas. Mirar las estrellas. Rebañar con el dedo. Hacer pompas de jabón en la ducha.
Saltar, reir, gritar, soñar, VIVIR.

Porque parte de mi vida se la debo a ella.

He pensado tantas veces en escribirte...no me salen las palabras. No quiero fastidiarla. No quiero quedarme corta. Eres demasiado grande, demasiado maravillosa.
Eres la única que me has hecho llorar como nadie, pero también la que me ha hecho ser la más dichosa. Con sólo oir tus primeros acordes se me pone la piel de gallina.
Tantas veces me he tirado en la cama contigo. Me has comprendido, me has escuchado, me has consolado.
De todo corazón,

Gracias Música.

Gracias por ser tan especial, tan única, tan maravillosa.

Por estar ahí cuando nadie más lo estaba.

Por unir tantas almas, al escucharte.

Porque sin ti el mundo no hubiera evolucionado.

Bella. Hermosa. Tú misma.

Por hacernos llorar en momentos complicados y reir, soñar y bailar hasta el amanecer.

Por tantas noches en vela a tu lado.

Por ser la banda sonora de nuestra vida.

Gracias, por existir.

De soledad te llenas, conforme la botella se vacía.

Un día te levantas con ganas de comerte el mundo. Tiras la sábana hacia abajo de una patada y pones música bien fuerte. Sonríes a personas que ni si quiera conoces, y te lo tomas todo con buen humor. No existen preocupaciones.
Al día siguiente, todo cambia. El despertador retumba en tus oídos, y sí, pones música. Pero música tan alta que no escuchas lo que piensas. No quieres. Te ríes con una sonrisa dibujada en la cara, y bebes. Y lloras. Y por culpa de ese día, nada volverá a ser igual. Por culpa de tu egocentrismo. Se preocupan por ti, pero ya nada pueden hacer. Te estás consumiendo como el cigarro que has dejado a medias. Te estás pudriendo.
Nunca más volverás a comerte el mundo. El mundo te está comiendo a ti.

Thanks Davey (:

Empezó a llover, y corriste hasta el portal más cercano. Ella no te siguió, se quedó mirando a una mendiga y le dio su paraguas. Fue hasta donde estabas y te tendió la mano, tiró de ella y te invitó a bailar bajo la lluvia. Estaba feliz, realmente feliz. Las gotas pronto empaparon la ropa y se transparentaba lo que llevaba debajo. Aún así, ella no hizo nada para taparse y siguió de farola en farola, saltando y dando patadas a los charcos.

Pronto la calle quedó desierta, las luces se encendieron y la mendiga se fue, un tanto asustada. Corriste detrás de ella, para pillarla por sorpresa y darle un abrazo, pero no calculaste bien y resbalaste con la lluvia. Tuviste la suerte de caer sobre un pequeño jardín, y te quedaste ahí tumbado, mirándola. Ella feliz, ella loca, ella bella. Se dio cuenta y fue a donde estabas. Tu esperabas algo más, pero ella...ella te susurro al oído. Te dijo, que lo que realmente le hacía pensar que la vida merecía la pena, eran esos momentos, y toda mojada, corrió hacía el taxi que esperaba al final de la calle.

Ser persona, ¿es un trabajo?

Pensar en el futuro da vértigo. No sé por qué tanto empeño en tenerlo todo planificado, en tenerlo todo bajo control. Tan poco entusiasmo en vivir la vida segundo a segundo. Milésima a milésima. Lágrima a sonrisa.
¿Qué quieres estudiar? Sólo hacen que preguntarme eso.
Enfermera, bióloga, azafata, maestra, música, deportista, abogada, barrendera, monja, artista, informática...
Pero por qué tanto agobio. Sé lo que quieras ser. Ya habrá tiempo de probar cosas, ya habrá tiempo de equivocarse, tiempo de rectificar.
Soñadora, amiga, persona, bondadosa, egoísta, ganadora, perdedora, hermana, simpática, sociable...
Y tú, ¿qué quieres ser de mayor? Yo, quiero ser feliz.

Decepción.

Querida Navidad, te escribo porque te echo de menos.
Solo eres un momento más del año. ¿Más bello? Puede ser, el frío, la nieve, y las pocas hojas que dejó el otoño, hacen que realmente luzcas hermosa. Las calles, con luces, las tiendas llenas de vida. Las casas adornadas con sus mejores galas. Si, realmente eres bonita. Pero este año, te veo diferente. Ya no me pareces tan especial, tan cercana, tan amiga. Tu falsedad ha llegado a tal punto que tenía que decírtelo. Solo piensas en ti, y en el dinero que mueves. Antes, esperaban con ansiedad tu llegada, para reunirse familiares y amigos, y ser un poquito más felices por estas fechas. Un simple polvorón, podía ser el regalo más especial para ese nieto caprichoso, y poner la estrella en el árbol, era sin duda el mayor de los honores. Ahora solo piensas en compras y regalos, en comparar tu cena con la de la vecina, y aquel niño, en vez de por un polvorón, llora por no tener una televisión en su cuarto.
Te pido que vuelvas a ser la de siempre. En serio, vuelve.Te estaré esperando.
Atentamente, Ana.

Espérame.

Estaba intentando sacar una foto. Para eso, me apoyé en el muro de piedra y esperé unos segundos. Primer intento, fallido. Lo intento una segunda vez, y tu me ayudas a sostener la cámara.Tu brazo roza el mío, y se me eriza la piel. Sale mal otra vez. Lo intento una tercera vez, y con cuidado me pones el pelo detrás de la oreja. Tampoco sale ahora. Es como si Felifa se hubiera hecho cómplice de la situación. La cojo, dispuesta a cambiarme de sitio y entonces nos chocamos con torpeza. Mi cara se quede a escasos tres centímetros de tu cara. La brisa del mar, hace que mi pelo acaricie tu cara. Me quedo pensando en nada. Cierro los ojos, pero no me siento capaz. Me escabullo entre tus brazos y te doy un fuerte abrazo. Un abrazo que lo dice todo. Un quiero pero no soy capaz. Un quiero y no puedo.

Si lloras por no haber visto el Sol, las lágrimas te impedirán ver las estrellas.

Y camuflas cada lágrima con la mejor de las sonrisas. Saltas por la calle como si nada te importara. Te ríes hasta el dolor, pero te duele reír. Todo el mundo piensa que ya se te ha pasado. Que todo quedó en el olvido. Que al fin de cuentas era un simple pasaje en tu vida. Lo que no saben es que hace casi un mes, y tu todavía no estas mejor. No saben que sigues ahí esperando, cada tarde por si regresara, si se arrepintiera...Esperas a que regrese con su inconfundible mirada, pidiéndote perdón, cogiéndote de la mano. Esperas, que todo esto sea una horrible pesadilla, de la que él te despertará acariciándote las mejillas, limpiándote las lágrimas. Que sólo fuera un susto contra el hipo. Te creas un ideal que no existe, te enamoras del Sol , solo diciendo cosas buenas de él , sí, es hermoso, pero cuando lo estudias en profundidad, te das cuenta de que quema, arde, y es peligroso, y ya no lo ves tan bonito, pero aun así sigues ciega por su resplandor.

Wonderful♥

Y allí estas tú, delante. Justo en frente. Con ese regalo, maravilloso. No es mi cumpleaños, pero tú lo has hecho por mi. Los mejores regalos, son los que llegan por sorpresa, y hoy me haz hecho realmente feliz. Me encantan este tipo de sorpresas, no sabes lo que es, hasta que no desenvuelves del todo el paquete. Puedo estar 10 minutos toqueteando el paquete, y dándole mil vueltas a ver si adivino lo que es. Es un momento tan especial...Pero cuando tu estás en el otro lado, cuando eres tú el que ofrece el regalo, es casi mejor que cuando lo recibes. Mil cosas se te pasan por la cabeza en esos minutos (segundos, dependiendo de la persona) en los que se queda mirando el regalo. De repente se te pasa por la cabeza que no pueda gustarle, pero lo que no sabes es que solamente por el hecho de que sea tuyo le gustará.
Me sigues mirando fijamente, con tu regalo ahí delante. He recibido el regalo que más aprecio. Tu sonrisa.

El regalo más maravilloso que puedas recibir.

Say cheese.

Porque yo pienso que es el séptimo arte. Los insensibles dicen que solo es una imagen, quieta sin movimiento. No les cabe en la cabeza como puede despertar tanta pasión algo que solo dura una milésima. La que no lo entiende soy yo. Cada vez que observo algo con detenimiento, lo veo desde otra perspectiva, como si estuviera mirando por el visor de una cámara. Pienso como quedaría, desde diferentes ángulos, diferente temperatura, diferentes contrastes...

Es increíble lo que puede llegar a transmitirme una foto. No sería la primera vez que se me pusiera la piel de gallina, o que incluso, se me llenaran los ojos de lágrimas.

Y ahora hago referencia a un detalle. Si de verdad te gusta, te encanta, te apasiona la fotografía, no debería importar tu cámara. Un atleta ganó unas olimpiadas corriendo descalzo. 

Dulce persona, Mr Increible.

Estás sentado justo en frente. Subidos a un columpio, haciendo equilibrio para no caernos, ahí estamos nosotros, pequeños infiltrados en un mundo ya lejano. Te limpias el azúcar que tienes en las manos, aunque acabo de darme cuenta de que estamos completamente llenos de cristalitos dulces. Creo que tengo azúcar hasta dentro del calcetín. Nos quedamos en silencio, pero no es un silencio incomodo, por lo menos para mi no. Miro hacia al fondo, y veo un banco. El único banco que tiene protección contra la lluvia. El banco donde nos refugiamos aquella tarde, que empezó a llover inesperadamente, y me abrazabas para que entrara en calor. Tus brazos...De repente vuelvo a la realidad. Y me doy cuenta de que al verte sonreír, se me olvida todo. Nada me preocupa en ese momento excepto una cosa, limpiarme el azúcar que tengo en los calcetines.

Un nudo apretado.

Hoy he estado hablando casi una hora con una persona hasta ahora desconocida para mi. Me he dado cuenta de lo egocéntricos que somos. En estas últimas semanas, solo he pensado en mis problemas, mis desgracias y como mucho las de cuatro personas de mi entorno. Para mi esas eran las importantes. Estaba convencida de que no podían haber problemas mayores, o más importantes, pero no es así, hoy me he dado cuenta.
Gente que duerme a las puertas del metro. Niños que se han copiado en un examen. Chicas engañadas por un espejo. Gente que en vez de preguntarse qué hay de comer, se preguntan si hoy comerán.
Problemas, a pequeña o gran escala, pero que cuando son nuestros, nos parecen los más importantes, los más grandes. Piensa en las personas de tu alrededor. Piensa en sus pequeños o grandes problemas.

Cada cosa en su momento.

Cuando tienes tres, quieres tener cuatro, y poder entrar al parque de los "mayores". Cuando tienes ocho te sientes grande, pero te gustaría tener ya los diez, y que mamá te diera dinero para comprar las estampas de fútbol al salir del colegio. Cuando tienes quince, intentas aparentar diecisiete y colarte en las fiestas, y cuando ya los cumples, te quedas mal porque te queda un año para la "libertad". Por fin tienes veinticinco, te enamoras de alguien de treinta y dos, y te rechaza por se inmaduro. Llegas a los cuarenta y pasas la crisis con arrogancia y depresión, trabajo y estrés. Cuando tienes cincuenta y sesenta lo único que te interesa ya, es que no te pregunten por la edad. Se está acabando tu tiempo, tienes ochenta y cuatro años. Cáncer de pulmón. te das cuenta del tiempo perdido, y entonces piensas en lo que darías por volver a ser un niño. Correr campo a través persiguiendo gallinas. Merendando un buen bocadillo de chocolate preparado con dulzura por la abuela. Entonces empiezas a meterte en la vida de los niños de tu alrededor diciéndoles que no pierdan el tiempo, que lo vivan segundo a segundo, pero ellos no te hacen caso, siguen preocupados porque no verán por tu culpa su programa favorito.
Te hacen una donación. Has llegado a los noventa y seis años. Ahora es cuando realmente te das cuenta. Cuando realmente sientes que estas viviendo de verdad. Como volver a nacer y tener una última oportunidad.

Personas "normales", gracias por hacerme sentir diferente.

Levántate, mírate al espejo y dime que ves. Una cara más, hinchada por las horas de sueño, ojeras del tiempo que malgastaste en no estudiar, y un pelo que nada tiene que ver con el del día anterior. Elige algo que ponerte. Si, mete tripa. ¿Para qué? ¿Para que te peinas como todo el mundo? ¿Qué sientes al cruzarte en tu rutina a tres personas con la misma camiseta? ¿Por qué intentamos seguir un prototipo perfecto? Quizás ese prototipo varíe. Quizás no tienes porque seguir el mismo que siguen los demás. Quizás podrías utilizar las horas frente al espejo a  meditar sobre si de verdad merece la pena ser así. Yo por lo menos, eso es lo que intento.

Como siempre, lo urgente no deja tiempo para lo importante.

Me encanta el helado de frambuesa.
Ayer leí en un libro, que si te invitan a helado de frambuesa, se están declarando. ¿Quién se ha inventado semejante parafernalia? ¿Qué pasa con los que nos gusta el helado de frambuesa por que sí? Ese sabor a fruta del bosque tan especial, y esas pepitas congeladas que puedes mordisquear. Simplemente es un pequeño placer, un pequeño juego con tu lengua y el helado, que intenta ganar para no quemarse con el frío. Entonces, cuando salga y me quieran invitar a un helado, ¿qué tengo que hacer? ¿me resisto y pido un normalucho helado de chocolate o pido sin más uno de frambuesa?
Creo que de momento, seguiré pidiendo de limón.

Primeros diez minutos sin ti.

Son las 12.37 de la noche.
Hace unos 10 minutos que ha acabado nuestra conversación. Entre sollozos, hipo y mocos, te cuento lo que ha pasado. Se acabó. Se acabó mi felicidad completa. Se ha ido una parte de mi, pero espero que vuelva.
Hace justamente un mes que no cojo esta libreta. ¿Sabes por qué? En ella escribo lo que realmente me emociona, me llena escribir, me consuela. Y hay demasiados sentimientos. Ahora mismo un impulso me ha hecho encender la luz y soplarle el polvo. Porque te lo mereces. Me llenas de tranquilidad y me enseñas un poco de la luz que hay al final del túnel, y mis lágrimas poco a poco, dejan de mojar la sábana. Me distraes, hablas de boberías, pero boberías que hacen que me sienta mejor. Boberías que nadie entenderá.
Es la 1.25. Hoy se habrían cumplido dos meses de felicidad completa.