Monday 18 April 2011

Nada que objetar.

Porque sí. Porque sí y punto. Porque hay veces que simplemente pasa. Personas que entran y que se van. Es ley de vida. Pero aún así duele. Un dolor sin cura, sin medicamentos. El dolor más fuerte, más doloroso. ¿Y por qué? ¿Por que a mi? Y pensar que no puedes hacer nada. Nadie puede hacerle nada, nadie te puede ayudar aunque lo intentan. ¿Lo sienten? ¿Lo sienten? Pero que van a saber ellos, ni siquiera le conocían. No lo sienten de verdad, no sienten tu dolor. Lo único que sienten es tu sequedad.

2 comments:

Eme said...

Es cierto, y es que cada nadie más siente lo que nosotros mismos sentimos, por mucho que digan...
Un saludo ;)

Ana Ascanio said...

Otro :)